En el presente informe se tratará
de describir cómo fue la primera toma de contacto con los Hare Krishna en el
centro de Lima.
La primera visita que se realizó
fue a la oficina del Templo Hare Krishna - ISKCON ubicada en
la Av. Wilson 1670, donde en un primer momento encontramos un restaurant
vegetariano muy particular puesto que tenía en la entrada afiches Hare krishna
los cuales contenían programas de eventos tales como horarios para la
adoración, meditación, etc y un segundo programa con las actividades mensuales
de la casa Hare Krishna.
Luego se procedió a entrar al restaurante pudiéndose apreciar en un primer
momento que era como cualquier otro restaurante vegetariano de la zona, pero con
algunas peculiaridades tales como:
- Un primer mostrador dedicado a la venta de libros espirituales tales como el Mantra, yoga, karma, etc.
- Un segundo mostrador dedicado a la venta de artículos religiosos tales como cuentas que son como una especie de rosarios para sus oraciones, algunas túnicas, imágenes, representaciones en miniaturas, etc
Al principio nos encontrábamos algo desconcertados e
incrédulos sobre si era el lugar correcto puesto que era un restaurante vegetariano
como cualquier otro, luego de ver los estantes quedamos algo mas confundidos
porque no veíamos gente vestida como Hare Krishna pero sí sus libros y objetos.
Siguiendo con nuestra visita, tuvimos la oportunidad de
hablar con el encargado del restaurante vegetariano quien confirmo que ese sitio
era una casa Hare Krishna y que si queríamos
pues que fuéramos a las oficinas que están ubicadas en el 2do piso de la
casa que allí nos darían mayores informes.
Aún seguía siendo raro todo esto puesto que teníamos en mente
encontrarnos con personas vestidas con túnicas, con la cara pintada y
descalzos, pero fue todo lo contrario.
Algo incrédulos, subimos al segundo piso donde se encuentran
las oficinas y nos dimos con la sorpresa que era una oficina como cualquier
otra, con teléfono, computadora, impresora, escritorio, un archivo de
documentos y grandes paquetes de libros para la venta y con dos señoritas que
lo atendían. Seguía siendo raro, puesto que aún no veíamos a las personas
vestidas con túnicas o con signos de ser Hare Krishna.
Muy amablemente nos atendieron y confirmaron que si era una
casa Hare Krishna, que esa era la oficina comercial pero que si queríamos gustosamente
podrían presentarnos a alguien con quien hablar y nos informe más acerca de la
religión a lo que accedimos.
Luego de unos minutos de espera, nos presentaron a Lila
Khanta quien gustosamente nos empezó a explicar algunas cosas del Hare Krishna. En dicha conversación nos hablo
de todo un poco, nos empezó a contar que es una religión que data de muchos
años atrás en la india, que lo que busca es profundizar en los temas del
espíritu y que el Bhagavad Gita se puede resumir en que “Todas las cosas inclusive
los dones, son gracia de Krishna, son prestados, y que el apegarnos mucho a
ellos es el problema por lo que es muy importante la renunciación tanto de
objetos materiales como sentimentales, ya que ellos no impiden llegar a un
plano espiritual superior”.
En medio de una conversación algo informal (que no fue
grabada) se hablaron de muchos temas por espacio de 30 minutos, los cuales
resumimos en lo siguiente:
- Lo material quita el deseo de espiritualidad, reflejado en la ausencia del alma.
- No descartan lo desarrollado en la Biblia, pero lo consideran muy básico.
- El financiamiento antes era a través de donaciones, pero con el tiempo cada casa se volvió económicamente autosuficiente, generando sus propios ingreso tales como ingresos por la venta de libros, comida vegetariana, clases de yoga, parafernalia, etc.
- No hay proselitismo, invitan a todos a vivir su espiritualidad sin necesidad de despojarse de su religión.
- Hay diferentes deidades de acuerdo a las escrituras que se basan en los pasatiempos del Dios Krishna.
- Creen en el karma que es el producto de tus acciones pasadas, por lo que también creen en la reencarnación.
Con el transcurrir del tiempo en que se pudo entrar más en
confianza con Lila Khanta, nos contó que su nombre se lo puso su guía espiritual
en función de su aura y pasatiempo; A continuación nos invitó a su ceremonia de adoración de 6 y 30
a 7 pm y a su meditación del Bhagavad Gita que era de 7 a 8 pm y a la ronda de
preguntas que fue de 8 a 8 y 30 pm.
Algo resaltante fue lo abierto que fueron con nosotros, a tal
punto que nos permitieron tomar fotos, grabar la meditación y la ronda de
preguntas.
Se puede ver como este salón en la parte izquierda tiene un
sillón con la imagen de su fundador y en la parte superior la oración Hare Krishna.
Grande fue nuestra sorpresa cuando empezaron las adoraciones ya que abrieron la
cortina y pudimos ver la imagen de su dios Krishna, la cual dicen que es tan
bello que ninguna mujer iguala su belleza.
Se pudo escuchar la oración Hare Krishna por espacio de 30
minutos, cantando casi en diferentes tonadas de voz, seguidas de un sonido de
mridanga o khol que es un tambor de terracota, de dos parches, que se utiliza
en el norte y este de India como acompañamiento de música religiosa. Cabe
resaltar que su saludo a su dios es arrodillarse con las dos rodillas, las dos
manos adelante y una reverencia hasta que las manos toquen el suelo por espacio
de 10 segundos mientras dicen una oración en hindú.
El día término con la ronda de preguntas luego de leer un
pasaje del Bhagavad Gita (capitulo 18, oración 27) que hace referencia a la
renunciación como un medio para alcanzar un nivel más alto de espiritualidad.
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